Todas las mujeres embarazadas pasan por el momento en que se preguntan ¿qué debo comer? Ello propiciado por la preocupación del bienestar principalmente del bebe que genera dudas sobre la Alimentación en el Embarazo.
Una alimentación adecuada es la base para un sano embarazo y es decisiva para el normal desarrollo del bebe. Hoy en día la aparición de algunas enfermedades en la mujer embarazada, relacionadas con carencias nutritivas son muy comunes, debido a que el ritmo de la vida moderna, los horarios de trabajo y el auge de la comida rápida pueden ocasionar una ingesta inadecuada de nutrientes esenciales.
¿Qué, cómo y cuándo comer durante el embarazo?
Hay que recordar que es un mito que hay que comer por dos, pero es importante saber que en esta etapa y en especial en el segundo y tercer trimestre, así como en la lactancia, los requerimientos nutricionales en el organismo de la embarazada son mayores. Por eso, una buena alimentación de la madre es esencial para el comienzo de la vida saludable del bebe.
Una dieta equilibrada y un buen conocimiento sobre nutrición son elementos claves para la mujer embarazada.
¿Qué es una dieta balanceada?
Es aquella que con una cantidad adecuada y variada de alimentos proporciona los nutrientes necesarios para el normal funcionamiento actual y futuro del organismo: proteínas, carbohídratos, lípidos, vitaminas, minerales y agua.
En general, el embarazo es una ocasión ideal para hacer una dieta balanceada que la habitual, cumpliendo las siguientes recomendaciones:
- Carbohidratos:
Legumbres, pan, arroz y pasta deben constituir la base de cualquier dieta equilibrada. Come al menos uno de ellos una vez al día. Si logras que constituyan cerca del 50% de tu dieta, tu cuerpo y el de tu bebe te lo agradecerán.
- Leche y derivados:
Se deben consumir por lo menos dos vasos de leche diarios.
- Azúcares:
Evita la tentación de abusar de los dulces de pasteleria, pues contienen sobre todo azúcar y grasa de origen dudoso. No se recomienda los edulcorantes artificiales.
- Carnes:
Comer diariamente carnes con poca grasa, bien cocidas (evita las carnes crudas y los embutidos) puedes sustituirlas por pescado y huevos.
- Frutas y Verduras:
Consumir cualquier fruto del tiempo de cosecha todos los días, en dos o tres comidas. También puedes consumirlas en las meriendas. Debes consumir a diario verduras, crudas o cocidas. Te aportan fibra, vitaminas y minerales.
- Pescado:
Debe consumirse en la misma proporción que las carnes. Tiene tantas proteínas como la carne, aunque es menos energético.
- Huevos:
Debes tomar de tres o cuatro huevos a la semana.
- Aceites:
Limitar se consumo. Evitar los guisos y las salsas. Utilizar preferiblemente aceites vegetales de oliva, girasol o soya.
- Bebidas Alcohólicas:
Evítalas durante todo el embarazo, ni siquiera en cantidades mínimas y en ningún caso durante el primer trimestre.